Pasar una noche de luna llena entre campos de lava, caminar por senderos rodeados de volcanes, pisar arena negra mientras rompen las olas y cae el sol en armonía perfecta con el paisaje ocre y rojizo. Degustar sus papas arrugadas, el queso de cabra, las lapas, los pescados sazonados con mojo. Maridar su rica gastronomía con sus vinos (malvasia, moscatel). Navegar por sus cristalinas aguas visitando las mejores calas o descubriendo sus encantos sumergidos.
Estas son algunas de las muchas actividades de ocio que se pueden disfrutar en la isla de Lanzarote, la “conejera”. La “Isla de los cien volcanes”, la más oriental del Archipiélago Canario, fue declarada en 1993 Reserva de la Bioesfera por la UNESCO, cuenta con doce espacios protegidos y más del 40% de su superficie tiene alguna categoría de protección europea, estatal o autonómica. Lo que da idea de su inmensa riqueza natural y cómo su población, haciendo mención especial a César Manrique (1919-1992), ha sabido conservar y acrecentar sus valores.
Reportaje realizado para el portal Turismo en la Red www.turismoenlared.es
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